Me levanté ésta mañana pensando en aquel maravilloso amor del cual mis hermanos siempre me hablaban, aquel amor indescriptible, incondicional y de una dimensión desconocida por los sentimientos humanos, y decidí escribir éste texto, quería darle gracias a dios por tanta bondad conmigo.
Pensaba que si tuviera que darle las gracias por mi vida, por cada día de mi vida, probablemente estaría en falta, pues lo constante en mí fue siempre levantarme, vivir y creer que la vida se generaba espontáneamente, que de por sí mismo, por mi propia voluntad yo existía y que yo tenía el control de la misma, decía yo en mi profunda ignorancia y vanidad “ Me gusta ser el héroe de mi propio cuento, donde yo mismo escribo cada día los acontecimientos y borro lo que no me agrada a mi antojo” tonta y burda manifestación del egocentrismo humano, creía que tenía el control total que todo dependía de mí, que equivocado estaba, deambulaba por el mundo sin saber porque hacía las cosas, pero las hacía, quería llenar vacíos del alma con cosas materiales y cosas superficiales, la vanidad, la envidia, la mentira eran las causas que yo mismo autogeneraba en mi vida.
He vivido 25 años y de los 24 años anteriores casi por ninguno le dí gracias a dios, tal vez esta carta sea el homenaje mas profundo que puedo hacerle, pues cada línea nace de mi corazón, lo ofendí mucho. Imagínese el lector, yo tenía héroes, humanos pero les atribuía categoría divinas, y aún así el señor me amaba, prefería al mundo antes que a él, y el aún me amaba, me metía en cada problema, pero el aún me amaba, le falle tantas veces y el aún siguió esperando.
Mamá siempre decía “ la persona que te quiere, te corrige, porque quiere que seas mejor” cuanta razón tenía, viendo a tras en mi vida, cuantas cosas pasaron y cuantas lecciones me dio, y yo no me daba cuenta, cuantas veces me habló por boca de mucha gente y no me daba cuenta, perdí muchos años lejos de él, pero esos años eran los necesarios tal vez, para que regrese a él, por que por todos los medios me llamaba, era el quien me llamaba, pero yo no le escuchaba, no era como mama que esperaba siempre para regañarme por algo que hice, el me esperaba para calzarme un nuevo calzado y darme un nuevo vestido, aun cuando yo no merecía nada, por que mucho pequé y poco lo quise, por que el mundo me cegaba, quería ganar el mundo para mí, quería usar los talentos que me dio para dárselos a otro amo, pero aún el me amó.
Ese amor fue el único capaz de vencer al mundo, el único capaz de hacer que perdone a mi enemigo y que lo ame, el único que pudo hacer que mis pasos sean seguros y no perdidos, por que solo no podía, el único que me hizo capaz de ser bondadoso, generoso, y reconocer en mi hermano a mi mismo, es él, el mismo padre, a través de Jesús que obra maravillas en lo desechado y despreciado.
Ciertamente puedo afirmar que si de mí nace algo de bondad, de seguro no soy yo, ninguna virtud puede emanar de mí por mi mismo, ya que por mi mismo no puedo hacer el bien, por mi mismo no puedo sentir el dolor de un hermano, ni comprenderlo ni asistirlo, más si estoy con el señor, si el padre esta conmigo , puedo realmente ver en mi hermano a mi prójimo, sentir su dolor , socorrerlo. Yo razonaba con la lógica humana, quería comprender lo divino, con lo carnal y con mi cerebro, pero a dios lo entiendes con el corazón, que así fue como lo quiso él, que sea así, pues era más fácil para nosotros entenderlo, pero todo lo complica la mente humana, todo lo simple lo vuelve complejo, no podía darme cuenta en actos tan simples de la vida cotidiana que dios me hablaba, que dios estaba ahí más vivo que nunca y era tan fácil como pensar que acaso cuando una madre, desde el primer día que sabe que va a concebir un bebé, ¿No lo espera y le prepara lo mejor para su llegada? , De la misma manera el padre en el cielo me preparaba lo mejor a mí a ti a todos, las mejores alegrías de éste mundo, él nos dió sus consejos para ser felices aquí, mientras nos preparaba la cena especial, el banquete de bienvenida donde los ángeles se gozan de ver la gloria de dios y de ver su justicia misericordiosa diferente a la justicia humana.
Pero acaso hermanos míos, piense usted, un bebé antes de nacer puede sobrevivir por sí mismo, necesita del cuidado externo de la madre para que él pueda nacer sano y lleno de vida, al igual , el padre nos protege una y otra vez en éste mundo de la maldad, de la envidia y de tantos males que acarrean nuestros pecados, por los cuales deberíamos responder, Más aún tenemos la misericordia de dios, misericordia no sacrificios dijo el señor es lo que quiero. Entonces ¿ por qué? Por que si el amor humano puede ser grandioso, cuanto más grande, pregunto mis hermanos, puede ser el amor de nuestro padre. Pues si el hombre en su imperfección puede hacer maravillas para prodigarse felicidad, cuantas más maravillas puede hacer el que lo creó, ¿Acaso la creación puede ser más que el creador? . El que le dió facilidad para hablar, inteligencia para inventar, no es acaso capaz de enseñarle el camino de la felicidad, pues si ella emana de él, solamente en él la podemos encontrar. Cuanto mas puede hacer aquel por nosotros que nosotros mismos por nuestra propia cuenta, ¿Acaso uno de nosotros por mas que ansíe o deseé, puede prolongar un solo minuto de su existencia?, en verdad ninguno de nosotros hermanos , y ¿Por qué el señor nos marca el camino? ¿Por qué nos da avisos sin darnos cuenta? porque desea ver nuestro rostro otra vez, nos vio cuando decidió que llegásemos a esta tierra y nos quiere ver de vuelta, ya que espera ansioso vernos y llenarnos de felicidad y por que no quiere que ninguno de nosotros se pierda.
Por eso envió a su hijo para que a través de él se manifieste su gloria , bien había dicho el maestro Jesús “raza de víboras , ésta generación pide señales , más no se les dará mas señales que las de jonás” ,pero aún así los prodigios se dieron y aún se dan , la misericordia de dios es grandiosa , ¿Acaso la mayoría de nosotros hermanos si un homicida mata a nuestro hijo , podríamos nosotros ser capaces de llevarlo a nuestra casa y hacerlo comer y cenar con nosotros? O de darle abrigo y guarecerlo , probablemente solo pediríamos justicia y detrás de ella esconderíamos la venganza fruto de la falta de misericordia en nuestro corazón.
Pero ¿Por qué el corazón del hombre capaz de creer en la palabra de otro hombre, no es capaz de creer en la palabra de quién le dio la vida? , Ésa respuesta es porque el hombre moderno solo puede creer en lo que ve, mas se ha olvidado que los ojos que no engañan al corazón son los ojos del alma, pues los ojos que se encargan de ver cosas físicas solo eso pueden ver, ¿Acaso se puede ver a través de los sentidos la ternura o las buenas intenciones de un hermano?-en verdad mis hermanos que no, solo nosotros en comunión con el padre podemos hacer que nuestros ojos vean el alma de las personas, reconocer en mi prójimo a cristo resucitado.
La única manera de ver con los ojos del alma y sentir que dios guía nuestros pasos es la oración, no hay otra, inténtelo, ponga su fe en aquel que si puede remediar cualquier problema, y le aseguro al 100% que no será defraudado, así encontrará y sentirá el amor de dios como lo sentí y siento yo , Y si eso es motivo de júbilo para usted y ya tiene al señor en su alma, trabaje para él, necesitamos más obreros para dios “ la mies es mucha pero los obreros pocos” gane almas para el señor, gane tesoros en el cielo donde nadie se los podrá arrebatar , gane corazones para él y el lo recompensará más de lo que usted se imagina. Pues si él ahora está conmigo y me consuela me aconseja y puede trabajar a través de mí , lo podrá hacer en cualquiera de ustedes.
Sólo resta decir que te quiero mucho padre mío, agradezco mucho las veces que me aleccionaste, porque sé que lo hacías para que yo sea cada día menos malo, porque querías salvarme de la condenación, te agradezco por cada minuto y segundo de vida que me has regalado, por mi familia, por lo bueno que he vivido y por lo malo que me ha tocado vivir, pues todo eso ha dado en mí el fruto de la paciencia y la compasión.
Perdóname por tanta maldad, por tanto odio en mi corazón, por todas las maldades que mi mente dibujó. Alguna vez te pregunté si podrías perdonarme por mi vida pasada y recuerdo que dijiste “ si perdone a pedro que me negó tres veces y a pablo que mataba a mis hermanos , como no te perdonaría a ti, si para eso vine” , recuerdo que se llenó de gozo mi corazón
Bendito seas padre mío, bendita sea la divina sangre de tu hijo Jesús, que fue por mí, por mi rebelión y por mi pecado, por mi sanidad, y por mi bendición.
Te quiero mucho dios mío, me enseñaste a quererte, no te alejes de mí, pues no puedo vivir si estás lejos de mí. Gracias por tu infinita misericordia, llévame de la mano a donde tu quieras que yo vaya, cumple tu voluntad en mí.
Te quiero mucho, tu hijo que estaba perdido, y al cual encontraste, ya no se irá de tu lado, permanecerá en ti, si esa es tu voluntad. Ya lo ven, mis hermanos, el amor de dios lo cambia todo, sólo déjense amar.....................
Gracias Padre mío, gracias señor Jesús.
César León Quillas
Economía – San Marcos
Instituto de Libre Empresa
http://www.ileperu.org/
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